Lesson 1: Welcome to London!

Hello girls & boys! Bienvenidos a la primera de estas lecciones de inglés londinense que vamos a dar estos días. Serán 6 (six) lecciones a 40₤ cada una (+ tasas + propinas) que harán un total de 60₤ x 6 = 360₤, o lo que es lo mismo, 540€. Ah, la propina del teacher no está incluída, claro :P

Empecemos por el principio pues. Estas lecciones no son más que una narración de nuestro viaje a Londres, entre los días 11 y 16 de Septiembre. Cualquier parecido con la realidad no es pura coincidencia, se llama realidad XD.

Todo empezó a las 9 a.m. en la terminal A del aeropuerto del Prat. Después de pasar una noche excitado y sin poder dormir por el viaje, llegar allí fresco supuso una buena taza de café y una ducha. Nada más llegar encontramos a Álex en la entrada, y Javi, Nacho y Toni llegaron enseguida. Mari tardaba porque se le había escapado el autobús, pero un viaje de Jordi 4 a buscarla y listo ;)

A eso de las 10:30 ya estábamos en el avión y preparados para despegar. Algo que me sorprendió de los vuelos de EasyJet es que allí llegas dentro del avión y te sientas como en el autocar del colegio, donde puedas y como quieras, así que nos sentamos casi todos en las ventanillas, jejeje. Para Alexander era el primer vuelo de toda su vida, así que iba cagadillo, pero no le supuso mucho problema, ya que se lo pasó bien.

Nada más llegar al aeropuerto de Luton nos hicimos la bonita foto con el avión que veis aquí arriba, y a parte nos dimos un buen paseíllo de 10 minutos hasta la cinta de recogida de maletas, pasando por una inmensa cola de admisión de pringados al país de las propinas, en la cual se nos colaron unos cuantos ingleses, una mala copia de Keith Richards y una familia negra al estilo príncipe de bel-Air. Salimos entonces del aeropuerto y nos dirigimos a la parada del bus, llegando a puntualidad inglesa y saliendo con la misma puntualidad, a las 13:10. el camino que duró así como una hora y media estuvo plagado de paisajes arbolados y de casitas típical english. Por el camino bajamos por la calle de Baker Street, la supuesta calle donde vivía Sherlock Holmes.

Una vez llegados a la estación de Victoria buscamos la entrada al metro para ir a la estación de metro de Earl's Court, donde teníamos nuestro cuartel general, el hotel Lord Jim. En la estación de metro nos sacamos la tarjeta Oyster, una de las diferentes tarjetas de transportes que hay en Londres, esta sirve para metros, autobuses y descuentos de algunos barcos que navegan por los canales del Thames. Aquí recalcaré que a Toni le devolvieron un billete de 5₤ muy bonito.

Una vez en el hotel, dejamos las cosas y nos dedicamos a chafardear por nuestras habitaciones. En la nuestra cohabitaba un inquilino del cual Nacho se encargó de dialogar con él con la ayuda de una de sus deportivas...

Llegaba la hora de comer, así que fuimos a la calle principal de Earl's Court y nos dirigimos al Subway más cercano para comer, como ya habíamos hecho en New York. Allí todos nos compramos la comida nos sentamos a esperar a los demás, pero Toni volvió cabreado con el dependiente... Le había dicho que el billete que le habían dado en las taquillas de la estación no estaba ya en circulación, jajajaja. Se estuvo cagando en el taquillero todo el viaje, y ni se le ocurrió ir al banco a cambiarlo, seguro que ya lo ha enmarcado en su casa y colgado de una pared :P

Una vez llenada la panza nos fuimos a ver el palacio de Buckingham. Por el camino vimos los típicos taxis, las típicas cabinas y los buzones, típicos, claro.

Después nos dimos un paseíto por Green Park, Hyde Park, por el Albert Hall y finalmente por Picadilly Circus.
-Green Park es impresionante, un gran parque de mucha hierba con la gente haciendo sobre él de todo, jugar, tai-chi, yoga, descansar, leer...
-Hyde Park grandioso, con el Sepentine Lake, un lago artificial con todo tipo de aves nadadoras (no, pingüinos no). Nos faltó pasear por allí en domingo viendo toda clase de chalados hablando, o de ver la estátua de Peter Pan, para la próxima vez, venga.
-El Albert Hall impresionante, delante de la estatua del Rey Alberto, todo circulado de cochazos para dar el cantazo.
-Picadilly Circus, una mierdecilla de plaza con una mierdecilla de estatua de Eros.

Allí en Picadilly cenamos en un Pizza Hut, pero OJO, no un Pizza Hut tontuno como los de aquí, sinó una especie de restaurante italiano, todo muy cuco y bien cuidado. La vuelta fue rápida y directa. Una vez tumbados en la cama y con los pijamas ya puestos nos pusimos a curiosear la televisión en busca de programas raros, y vimos un par. Uno de evangelistas y otro a lo Cops pero con la policía de Londres. Durante el transcurso del viaje vimos así como un coche de policía al día con las sirenas a tope...

Y así nos acostamos, viendo programas extraños y hablando del día que pasamos. Bueno, digo acostar, porque dormir no dormimos demasiado, entre la ventana abierta que Toni no sabía cerrar, o las cortinas que no encontramos hasta el día siguiente, las sirenas de las alarmas y los aviones volando raso.... qué desastre, jeje.

Y así pues, mañana más!!!! Ta mañana niños!

Listening: Runaway - Jamiroquai
http://www.jamiroquaimusic.com/